Alexlovekira te tomó por detrás de tus rodillas y colocó la punta de su palo sexual sobre tus abdominales, apretándolos. "Baja las manos", dijo Alexlovekira. Cumpliste, empujando tus dedos en tu entrepierna, sintiendo el dolor y el calor vaginal de ese único pezón que no has tocado. Alexlovekira se recostó sobre ti, y tú sonreíste, incapaz de dejar que tus ojos se desviaran. Su mano estaba alrededor de tu clavícula, apretando. Alexlovekira tomó la punta de su palo y lo tocó con tu lengua. Mientras Alexlovekira hablaba, su cuerpo tembló, y tú sentiste su estremecimiento. "Y ahora", dijo Alexlovekira. "Déjame oír tu voz. "Alexlovekira empujó su palo sexual hasta el techo de tu boca, y tuviste un espasmo. Alexlovekira lo retiró y te lo dio. No puedes mantener las vibraciones de tu mente. La miras. No puedes resistirte. Estás de rodillas, tu cara apenas sobre el suelo. Tus dedos están temblando. Su coño se siente como si te estuviera dando una mamada. Alexlovekira mira hacia abajo y sonríe, apretandote, ahuecandote en su mano. "¿Me quieres?" Alexlovekira pregunta. Tú asientes, y sus dedos se relajan en tu pezón. No puedes decirle que no. No puedes decirle que no. Alexlovekira se baja del sofá y camina hacia tu cama, inclinándose. Sus dedos se agarran a las mejillas de tu culo desnudo...