Norahorn se arrodilló y yo me metí entre sus piernas. Norahorn entonces se inclinó hacia adelante y se atornilló las caderas hacia adelante. Le metí los dedos en el culo y le puse una enorme gota de semen por todo el cuerpo. Norahorn gimió y me metí dentro de ella tan rápido que pude sentir que me golpeaba entre las piernas. Me levanté y la bañé, le quité la esperma y la preparé para su lección. La lección que Norahorn me dio, como todos los hombres antes y después, fue sobre cómo la excitaba con sus mamadas. Mis instintos naturales habían empezado a llevarme a usar mi pene con el único propósito de llevarla al orgasmo. Norahorn había sido un poco tímida sobre el sexo anal al principio y me preguntó si me gustaría mostrarle cómo. Le dije que sí y trajimos algo de porno a la habitación y le bajé los pantalones cortos y los esparcí. Me dijo que podía empezar lamiéndome la lengua mientras Norahorn ponía la cabeza de su polla contra mi abertura. Norahorn presionó la cabeza contra mí y mi cuerpo se tensó y todo lo que podía pensar era en cómo esta mujer me iba a sacar. Tomé la cabeza en mi boca y suavemente empecé a tragar. Estaba caliente, húmedo y resbaladizo y le di un poco de leche. La cabeza de su polla la excitaba más que nunca. Me dijo que a Norahorn le gustaba la forma en que le chupaba la polla y que iba a probar mi lengua de nuevo para mejorarla aún más. Norahorn se dio cuenta de que siempre quise que hiciera esto por mí y empezó a follarla con el culo mientras le bombeaba la polla con la boca...